Investiguemos los efectos de un campo magnético
observando la fuerza magnética ejercida sobre una carga que pasa a través del
campo. Para estudiar estos efectos, es útil imaginar un tubo de iones positivos
como el de la figura 29.13. Dicho tubo nos permite inyectar un ion positivo de
carga y velocidad constantes en un campo de densidad de flujo magnético B. Orientando el tubo en varias
direcciones, podemos observar la fuerza ejercida sobre la carga en movimiento.
La observación más importante es que dicha carga experimenta una fuerza que es
perpendicular tanto a la densidad de flujo magnético B, como a la velocidad v
de la carga en movimiento. Observe que cuando el flujo magnético se dirige de
izquierda a derecha y la carga se mueve hacia donde está el lector, la carga se
desvía hacia arriba. Si se invierte la polaridad de los imanes, se provoca que
la carga se desvíe hacia abajo.
La
dirección de la fuerza magnética F sobre una carga
positiva en movimiento con una velocidad v
en un campo de densidad de flujo B,
puede considerarse mediante la regla del tornillo de rosca derecha (véase
la figura 29.14):
La regla de la mano derecha: Extienda la mano derecha con los
dedos apuntando en la dirección del campo B
y el pulgar apuntando en la dirección de la velocidad v de la carga en
movimiento. La palma abierta está de cara a la fuerza magnética F sobre una
carga positiva.
Si la carga en movimiento es negativa, la
dirección de la fuerza se determina siguiendo el mismo procedimiento pero
usando la mano izquierda. De esta manera la dirección de la fuerza
magnética es opuesta a la dirección para una carga positiva.
Consideremos
ahora la magnitud de la fuerza sobre una carga en movimiento. La
experimentación ha mostrado que la magnitud de la fuerza magnética es
directamente proporcional a la magnitud de la carga q y a su velocidad
v. El tubo de ion positivo indicará, por medio de mayores desviaciones, si alguno
de estos parámetros aumenta
Se observará una variación no esperada en la
fuerza magnética si el tubo del ion se hace girar lentamente respecto a la
densidad de flujo magnético B. Como
indica la figura 29.15, para una carga dada con velocidad constante v, la
magnitud de la fuerza varía con el ángulo
que forma el tubo con el campo. La desviación de la
partícula es máxima cuando la velocidad de la carga es perpendicular al campo.
Cuando el tubo se hace girar lentamente hacia B, la desviación de la partícula disminuye gradualmente. Por
último, cuando la velocidad de la carga tiene una dirección paralela a B, no ocurre ninguna desviación, lo que
indica que la fuerza magnética ha caído hasta cero. Claramente la magnitud de
la fuerza es función no sólo de la magnitud de la carga y de su velocidad, sino
que también varía con el ángulo θ entre v y B. Esta variación se
explica al establecer que la fuerza magnética es proporcional a la componente
de
la velocidad, v sen θ, perpendicular a la
dirección del campo. (Consulte la figura 29.16.) Las observaciones anteriores
se resumen por la proporcionalidad
Si se eligen las unidades apropiadas, la
constante de proporcionalidad puede igualarse con la densidad de flujo
magnético B del campo causante de la fuerza. En realidad, esta
proporcionalidad se usa a menudo para definir la densidad de flujo
magnético como una razón constante:
Un campo magnético que tenga una
densidad de flujo equivalente a 1 tesla (1 weber por metro cuadrado), ejercerá
una fuerza igual a 1 newton sobre una carga de 1 coulomb que se mueva en forma
perpendicular al campo, con una velocidad de 1 metro por segundo.
Como consecuencia de la ecuación (29.8), se observa
que
Estas relaciones entre unidades son útiles para
resolver problemas que incluyan fuerzas magnéticas. Despejando la fuerza F en
la ecuación (29.8), obtenemos
que es la forma más útil para calcular directamente
las fuerzas magnéticas. La fuerza F está en newtons cuando
la carga q se expresa
en coulombs, la velocidad v se mide en metros por segundo y la densidad de
flujo B se expresa en teslas. El
ángulo θ indica la dirección de v
respecto a B. La fuerza F siempre
es perpendicular tanto a v como a B.
La dirección de estos vectores puede determinarse por medio de la aplicación de
la regla de la mano derecha. Cuando se representan vectores tridimensionales
gráficamente, resulta útil la convención de utilizar cruces (X) para indicar una dirección hacia el
papel. Estos símbolos podrían considerarse el “inicio” de las flechas de
vector. Usaremos puntos ( • ) para indicar puntas de flecha de vector que
apuntan hacia fuera del papel. En la figura 29.17 se muestran dos
ejemplos de este tipo. Para probar su comprensión del tema, verifique que la
fuerza sobre la carga positiva es ascendente y la que la fuerza en la carga
negativa se dirige hacia la derecha.
Un electrón se proyecta de izquierda a derecha en un
campo magnético dirigido verticalmente hacia abajo. La velocidad del electrón
es de 2 X 106 m/s, y la densidad de flujo magnético del campo es 0.3
T. Determine la magnitud y la dirección de la fuerza magnética ejercida sobre
el electrón.
Pía n: La carga del electrón es 1.6 X 10-19 C, la magnitud de la fuerza sobre el electrón se
calcula a partir de la ecuación (29.10) y la dirección se determina al aplicar
la regla de la mano izquierda. Se usa la mano izquierda porque la carga
de un electrón es negativa.
Solución: El electrón se mueve en una dirección perpendicular a B. Por tanto, sen θ
=1 ; resolvemos para la fuerza en la siguiente forma:
La aplicación de la regla de la mano izquierda para
un electrón muestra que la dirección de la fuerza es hacia afuera de la
página, o hacia el lector. (Para una carga positiva como un protón o una
partícula alfa, sería hacia adentro de la página.)
buenas nochees, de casualidad no tienen la seccion 29.1 magnetismo???
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